"Ellos (EEUU) dicen que las autoridades pueden obligar a hacer algo malo pero esto sería un suicidio para todo el sector del software ruso, que factura miles de millones de dólares al año, es una locura, es técnicamente imposible", dijo.
Explicó que es imposible introducir "una cosa secreta" en las actualizaciones de su software ya que luego se someten a un chequeo.
Lea más: Lo que se oculta tras las acusaciones de EEUU contra el laboratorio Kaspersky
Según Kaspersky, las autoridades de EEUU son conscientes de que la compañía no se dedica a ciberespionaje.
En opinión de Kaspersky, la empresa simplemente cayó víctima de la lucha de las fuerzas políticas.
"Ahora golpean todo lo que sea ruso y como estamos aquí también nos tocó a nosotros esta suerte", dijo.
Kaspersky Lab es una compañía dedicada a la seguridad informática con sede central en Moscú y con presencia en 200 países.
El 13 de septiembre, el Departamento de Seguridad Interior de EEUU ordenó a todas las agencias federales a discontinuar el uso de productos de Kaspersky Lab en los próximos 90 días ya que pueden comprometer la seguridad nacional del Estado.
Lea también: Kaspersky, ¿un 'caballo de Troya' ruso en las computadoras de EEUU?
Más tarde, Kaspersky aceptó testificar el 27 de septiembre ante el Congreso de Estados Unidos por las acusaciones contra su empresa, sin embargo la audiencia fue aplazada a una fecha indefinida.