"Creo que Donald Trump está preparado para tomar una posición fuerte. Este enfoque se basará en tres factores: el apoyo a las reglas del juego existentes, el apoyo a los principios comunes en el ámbito de la seguridad y la protección de sus intereses nacionales", explicó.
Volker enfatizó que este enfoque no debería ser considerado como una posición antirrusa, a la vez que agregó que Trump "quiere alcanzar un entendimiento con Rusia".
Según Volker, durante mucho tiempo, ambas partes se han visto atrapadas en este círculo y, como resultado, no se ha podido avanzar nada en casi tres años.
Tras aceptar el encargo de ocuparse de los asuntos relacionados con Ucrania, Volker se planteó el objetivo de profundizar en la discusión política.
El representante especial considera que el cese al fuego y el fin de los combates en Donbás "no son objetivos adecuados, sino que son los pasos" que deben emprender las partes implicadas en el conflicto para alcanzar sus objetivos finales. A su juicio, estos objetivos son "el restablecimiento de la integridad territorial, la soberanía estatal de Ucrania y la seguridad garantizada para todos los ucranianos".
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