Los desacuerdos en torno al INF han alcanzado un nuevo nivel, señala Andréi Polunin, columnista del diario Svobodnaya Pressa.
Tras reunirse con el secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, afirmó que Moscú está interesado en preservar el Tratado sobre la Eliminación de Misiles de Alcance Intermedio y Corto, siempre que no haya violaciones al respecto por parte de Washington.
"Tenemos sospechas de que los estadounidenses están creando sistemas de combate que violan o pueden violar las obligaciones establecidas por el Tratado. Planteamos abiertamente estas preocupaciones", sostuvo Lavrov.
Al aprobar un presupuesto militar exagerado, los congresistas, de hecho, confirmaron que EEUU había perdido la superioridad del poder militar y está buscando maneras de recuperarla en el menor tiempo posible y por un dinero razonable. En particular, se está considerando la posibilidad de crear misiles de alcance medio y corto, analiza Ermakov.
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"Está claro que, en este caso, EEUU se retiraría del Tratado INF. A eso se deben todas las disputas entre Moscú y Washington sobre si las partes cumplen las disposiciones del Tratado", opina el analista.
"Es posible que Rusia reaccione a la retirada de EEUU del Tratado con el despliegue de sus misiles de alcance medio. Los estadounidenses responderían también con el desplazamiento de sus misiles a Europa. Naturalmente, todo esto iría acompañado de una retórica propagandística de Occidente en contra de Rusia", señala Ermakov.
El analista está seguro de que nadie en Occidente cuestionaría la imagen de Rusia como 'peor enemigo' y dejaría a los estadounidenses desplegar los cohetes.
Sin embargo, Ermakov opina que todavía es pronto para hablar del despliegue real de misiles al cabo de 15 meses.
"Creo que es importante que Moscú deje claro a Washington que si EEUU continúa con el despliegue de misiles de alcance medio y corto en las inmediaciones de las fronteras rusas, estas acciones se considerarán como una amenaza militar directa a Rusia".
El experto sugiere que Rusia debe desarrollar sistemas para proteger su territorio de los misiles de alcance medio estadounidenses. Al mismo tiempo, es necesario explicar a los aliados europeos de EEUU que la política de Washington puede llevar al hecho de que Europa esté bajo la mira de los misiles rusos, según Ermakov.
"Parece poco probable que EEUU salga del Tratado INF", opina, por su parte, el miembro de la Academia de Problemas Geopolíticos, el coronel general Leonid Ivashov.
"Este complejo soviético superaba seriamente al Pershing-2A de EEUU: alcance de 5.000 km contra 2.700 km, el afuste automotor contra el remolque, tres ojivas contra una", recuerda.
La pregunta es si EEUU será capaz ahora de crear un proyectil móvil de alcance medio eficiente. Mientras tanto, Rusia tiene todas las oportunidades de reactivar la producción del Pioner.
"Y si los estadounidenses salen del INF, inmediatamente apuntaremos contra todas las instalaciones estadounidenses dentro de un alcance de 5.000 km. (…) Por lo tanto, creo que, finalmente, Washington no saldrá del Tratado INF", concluye Ivashov.