"Una de las amenazas más graves en el ámbito de la seguridad informática está relacionada con la formación profesional", alegó.
Para Garbuk, "sin lugar a dudas, los programas rusos de estudios en la esfera de las tecnologías son altamente valorados en todo el mundo, sin embargo, gran cantidad de egresados de los centros de estudios superiores rusos encuentran trabajo en compañías extranjeras, donde trabajan en la creación de programas".
"Al recibir una buena formación, la persona debe comprender que sus desarrollos son de interés de las principales compañías rusas, que él como especialista tendrá demanda y tendrá la posibilidad de aplicar sus capacidades y realizar proyectos interesantes en su propio país", añadió.
El FPI se creó en 2012 y actualmente trabaja en más de 50 proyectos, para lo cual se crearon laboratorios en los más prestigiosos centros docentes e instituciones científicas de Rusia.
Lea también: ¿Fuga de cerebros? Los países ricos de la UE se aprovechan del talento de sus vecinos pobres
En 2015 dentro del FPI empezó a funcionar el Centro Nacional de Desarrollo de Tecnologías y Elementos Básicos de Robótica.