Durante la ausencia del mandatario, la flamante vicepresidenta, Lucía Topolansky, asumirá la presidencia interina de Uruguay del 16 al 20 de septiembre, mientras que la senadora Patricia Ayala, tercera en la línea de sucesión, quedará a cargo de la vicepresidencia interina. De este modo el Ejecutivo uruguayo quedará, por primera vez en la historia, en manos de mujeres.
Según ONU Mujeres, la integración de las mujeres uruguayas en la vida política ha sido históricamente baja, caracterizándose no solo por un crecimiento lento pero también con períodos de declive. En el primer período democrático (1985 — 1990) no hubo mujeres en la legislatura nacional. Mientras que en el período 2010-2015 la representación parlamentaria fue de sólo del 14,1%, en un país donde, según el último censo, hay un 52% de mujeres.
"Esperemos que a futuro en las próximas fórmulas presidenciales hayan más mujeres representadas", indicó.
Ayala también se refirió a la violencia de género, un tema que "hace unos años estaba guardado en un cajón y que hoy está sobre la mesa".
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"Las diferencias entre hombres y mujeres existen y las celebro, pero es importante que no limiten las oportunidades que debemos tener como seres humanos en una sociedad. Lo importante es generar una masa crítica para lograr cambios estructurales. Cada vez lo vamos logrando más", concluyó.