Pensaba que su gato sería capaz de exterminar al roedor, pero ocurrió algo inesperado. El joven, presa del terror, comenzó a gritar histéricamente, mientras que su atemorizada mascota intentaba desesperadamente escaparse de la rata.
Eventualmente, el gato y el muchacho salieron corriendo del baño: en este cuarto, el roedor era y es el auténtico rey.