S-400 y S-500 vs F-22 y F-35: ¿quién ganará?

Eventualmente, Moscú encontrará una solución al problema del sigilo: es solo cuestión de tiempo, escribe Dave Majumdar para The National Interest.

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También es cierto que una defensa aérea estratificada e integrada puede efectivamente hacer que grandes franjas de espacio aéreo sean demasiado costosas para atacar usando aviones de combate convencionales de cuarta generación como el Boeing F/A-18E/F Super Hornet or Lockheed Martin F-16 Fighting Falcon, continúa el experto.

"Está bien claro cómo Rusia está tratando de abordar el problema del sigilo", dijo Mike Kofman, investigador especializado en asuntos militares rusos, durante una entrevista con The National Interest.

"El radar avanzado de Rusia, la variedad de misiles y sistemas que intentan integrar grandes cantidades de datos para una defensa aérea más potente segregarán cada vez más a las fuerzas aéreas occidentales. En un futuro habrá los que puedan penetrar y sobrevivir contra las avanzadas defensas aéreas y aquellos cuyo trabajo sea bombardear Daesh (grupo terrorista prohibido en Rusia) o sus sucesores", continúa.

No obstante, tampoco los sistemas antimisiles rusos son perfectos. "Las defensas aéreas rusas pueden parecer formidables… pero las áreas protegidas por estos sistemas están lejos de las burbujas impenetrables, o "cúpulas de hierro", como algunos analistas las han llamado", comenta Majumdar.

Pero Kofman por su parte señala que las avanzadas defensas aéreas construidas en Rusia, como la S-300 o la S-400 y la próxima S-500, vienen con sistemas diseñados para detectar y rastrear la presencia de aviones de baja observabilidad como el F-22 y el F- 35.

"Eventualmente, Moscú encontrará una solución al problema del sigilo mientras que la lucha cíclica entre la ofensa y la defensa continúa 'ad infinitum' y es apenas una cuestión de tiempo", concluye el artículo.