La medida causó una fuerte protesta del presidente ruso, Vladímir Putin, quien declaró que Rusia llevará el caso a los tribunales para proteger su propiedad en Estados Unidos.
A juzgar por la reacción de los medios internacionales, en Europa también muchos consideran que Washington no conseguirá más que aumentar las tensiones y hacer casi, o prácticamente imposible, la cooperación entre ambas potencias en el escenario internacional.
Asimismo, varios medios avisan de que la progresiva disminución recíproca del número del personal diplomático aumenta el riesgo de un conflicto real entre Estados Unidos y Rusia, aunque no sea directo, dada la complicada situación en torno de Corea del Norte o Siria.
Con semejantes medidas, Washington anima a sus aliados más radicales en Europa de Este a lanzarse al ataque contra Rusia.