El anuncio del cese del programa de Acción Diferida de los Llegados en la Infancia (DACA, por su sigla en inglés), este 5 de septiembre, era esperado en Estados Unidos. La iniciativa de la gestión del expresidente Barack Obama para solucionar, aunque de forma temporal, la situación de inmigrantes que llegaron al país con menos de 16 años después de 2007 ahora deberá ser reformulada por el Congreso.
Congress, get ready to do your job — DACA!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) September 5, 2017
La inmensa mayoría de beneficiados por el DACA es oriunda de países latinoamericanos, sobre todo México, cuya cifra de 689.029 postulantes inicialmente aceptados supera la suma de los otros 23 países de origen con más solicitudes, según el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés).
Entre los países que no componen América Latina, Corea del Sur lidera el ranking: 7.813 soñadores de la legalidad permanente. Filipinas figura con 5.055 inicialmente agraciados con el decreto de Obama. India, Polonia y Paquistán les siguen con números menores.
Tras la confirmación del cierre del DACA, ya esperado desde la campaña presidencial de Trump, con discursos antimigratorios, jóvenes se concentraron frente a una de las torres del mandatario para protestar.
Crowd growing outside Trump Tower where DREAMers and advocates are protesting over DACA pic.twitter.com/VTgjn8hSkh
— Cora Lewis (@cora) September 5, 2017
El tema reabrió el debate sobre la política migratoria de Estados Unidos y agitó las redes sociales, con comentarios a favor y en contra del DACA. Si el Congreso no logra aprobar una ley para regularizar la permanencia de los "dreamers" en suelo estadounidense, esos jóvenes tendrán sus permisos de trabajo o estudio cancelados y podrán ser deportados a partir del 5 de marzo de 2018.