Un abismo separa los precios de ambos modelos: el Model X de Tesla tiene un precio de 145.000 dólares, ya de por sí elevado, mientras que el Lamborghini Aventador ronda los 500.000 dólares.
El resultado de la carrera de 400 metros resulta sorprendente, porque el vehículo de Tesla no está pensado especialmente para la velocidad, mientras que el Lamborghini es famoso por sus prestaciones sobre la pista. Para colmo, el auto creado por Elon Musk es completamente eléctrico.
El secreto de su victoria
El Model X permite activar una opción 'turbo' denominada Ludicrous Mode, que pone toda la carne en el asador y confiere un extra de 60 km/h en tan solo 2,5 segundos.
Si bien es cierto que el Lamborghini Aventator no consigue acelerar a esa velocidad, también lo es que logró alcanzar al Model X. Eso sí, lo hizo fuera de tiempo: el vehículo eléctrico de Tesla ganó por solo 0,5 segundos.
Lee más: ¿Podrá Tesla derrocar a BMW en Alemania?
¿Significa eso que un Tesla Model X es más rápido que un Lamborghini de 500.000 dólares? No necesariamente, pero sí cuando compite en una pista de 400 metros.