El corresponsal, Elias Karram, que trabaja para Al Jazeera desde 2011, contará sin embargo con la oportunidad de explicar a Chen el contenido de una entrevista que concedió el año pasado a un medio árabe vinculado a los Hermanos Musulmanes, antes de ver definitivamente revocado el permiso de trabajar en Israel como periodista.
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"En tanto que periodista palestino en un territorio ocupado, o en una zona de conflicto, el trabajo periodístico es una parte integral de la resistencia y un trabajo político y educacional", dijo entonces Karram, que tiene 40 años.
"El periodista realiza su trabajo periodístico en la resistencia con la pluma, la voz o la cámara, porque es parte de su pueblo y expresa su oposición de una manera única", añadió.
El director de la Oficina de Prensa del Gobierno declaró a través de un comunicado que se reunirá la semana que viene con Karram para que le explique el contenido de sus palabras en la entrevista con Dar al Iman.
"Cualquiera que tome partido activo en la lucha política lo puede hacer cumpliendo con la ley, pero sin la tarjeta de prensa emitida por el estado de Israel", dijo Chen.
La denuncia que recibió la Oficina de Prensa del Gobierno fue presentada conjuntamente por la oficina del primer ministro, Benjamín Netanyahu, y por el ministro de Comunicaciones, Ayub Kara, quienes presentaron la grabación de la entrevista con Dar al Iman.
En las últimas semanas se multiplicaron las voces de agentes israelíes que piden el cierre de la oficina de Al Jazeera en Jerusalén.
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Las oficinas del canal catarí, el más visto en Oriente Próximo, ya fueron cerradas a principios de junio en varios países de la región, que acusaron a Al Jazeera de fomentar el terrorismo.