Kara acusó a Al Jazeera de dar cobertura al "terrorismo" y de poner en peligro la democracia israelí.
Los mencionados países acusan a Al Jazeera de fomentar el terrorismo y el radicalismo religioso en sus emisiones al mundo árabe.
Ayub Kara, por su parte, dijo hoy que Al Jazeera está al servicio de Irán y de la organización chií libanesa de Hizbulá.
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El ministro de Comunicación israelí confirmó que se dirigió a la oficina de prensa del gobierno de Benjamín Netanyahu para requerir la retirada de las tarjetas de prensa de los periodistas de Al Jazeera, aunque el requerimiento todavía no se ha contestado.
"La cadena seguirá el desarrollo de los acontecimientos (…) y adoptará las respectivas medidas legales", comunicó el medio.
Al Jazeera rechazó las acusaciones de dar cobertura al terrorismo y de poner en peligro la democracia israelí y subrayó que continuará cubriendo las noticias en los "territorios palestinos ocupados, haciendo su trabajo de manera profesional".
Previamente el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ya había anunciado los planes de cerrar las oficinas de Al Jazeera en Israel.
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Netanyahu prometió introducir enmiendas a la legislación si no se consigue cerrar las oficinas de Al Jazeera con los medios jurídicos disponibles.
