"La posibilidad de una intervención militar no debería ni siquiera ser considerada. América es un continente de paz. Es la tierra de la paz", expresó el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, mientras recibía al vicepresidente de EEUU, Mike Pence.
Desde otros países latinoamericanos se han escuchado comentarios similares a los pronunciados por Juan Manuel Santos, independientemente de su postura ante el actual Gobierno en Caracas. Así, la Cancillería peruana emitió una declaración condenando el posible uso de la fuerza. México también se unió y afirmó que la crisis que vive Venezuela no puede ser resuelta mediante la fuerza. En Brasil agregaron que la renuncia a la violencia es la "base de la cohabitación democrática".
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"Las historias de intervenciones estadounidenses, a menudo feas, se recuerdan vívidamente en América Latina, incluso si nosotros en EEUU las hemos olvidado", compartió con The New York Times Shannon K. O'Neil, especialista en temas de América Latina del Consejo de Relaciones Exteriores de EEUU.
Esta reacción unánime a las declaraciones de Trump tiene mucho que ver con la historia de América Latina. La mayoría de los países de la región, de una manera u otra, han sufrido intervenciones estadounidenses.