La naturaleza de estas explosiones sigue siendo un misterio para los científicos, que creen ver en ellas señales extraterrestres.
"Las observaciones de los últimos 10 años muestran que el universo está literalmente plagado de agujeros negros de diferentes tipos y masas. De acuerdo con la teoría de la relatividad, los agujeros negros deben ser estables pero, hoy en día, los científicos creen que poco a poco 'se evaporan' bajo la influencia de efectos cuánticos", explica Carlo Rovelli, astrofísico de la Universidad de Toulon (Francia).
Estos agujeros son inestables por naturaleza. Tan pronto como comienzan a disminuir, los efectos cuánticos proceden a destruirlos, haciendo que las partículas de la materia salgan de sus entrañas mediante el efecto túnel cuántico. Según Rovelli, el agujero negro se convierte casi inmediatamente en su peculiar némesis, el 'agujero blanco', y revienta con una potencia comparable a la de la explosión de una supernova típica.