"Iglesia Católica vive un paulatino descenso en América Latina"
Citan al expresidente George W Bush y su 'eje del mal', como así también la convicción de que el deber de los Estados Unidos es 'liberar al mundo del mal' como ejemplo de lo que califican "una lengua maniquea que divide la realidad entre el Bien absoluto y el Mal absoluto". Buscan el origen en el movimiento fundamentalista evangélico que surgió a principios del siglo XX, y lo vinculan a la consideración de los Estados Unidos como "una nación bendecida por Dios".
"Cuando uno tiene partidos corruptos por todos lados, lo más probable es que si aparece un grupo relativamente ético y ligado a lo trascendente tenga un espacio de crecimiento importante, porque el resto de la sociedad le está diciendo que sus propuestas son muy lindas pero no son creíbles. El ejercicio de la política desgasta y cuando se aleja mucho de los ciudadanos, ahí aparecen las otras propuestas", destacó Da Costa.