"Respaldamos al Gobierno constitucional liderado por el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro", sostuvo la Cumbre de los Pueblos en un comunicado emitido desde Mendoza, capital de la provincia argentina homónima (oeste).
Esta herramienta, contra la que se pronunciaron 7,2 millones de venezolanos el pasado domingo en una consulta informal, funcionará como un "mecanismo de diálogo y concertación de todos los actores de la sociedad venezolana y expresión genuina de la voluntad del pueblo y único camino para la paz", consideraron las agrupaciones sociales.
En otra parte de su texto, las organizaciones participantes alertaron sobre "las amenazas intervencionistas de Estados Unidos" que intentan bloquear a Venezuela, y rechazaron la suspensión del país caribeño del Mercosur "por constituir un duro golpe a la institucionalidad del bloque regional".
El Mercosur está integrado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela, actualmente suspendida, mientras Bolivia está en proceso de convertirse en miembro pleno.
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Los delegados sociales criticaron, principalmente, la presencia en la cumbre del presidente de Brasil, Michel Temer, un "golpista" que "ejerce en forma ilegítima e ilegal el Gobierno" de su país, en referencia al proceso de impeachment que el año pasado puso fin al mandato de la presidenta Dilma Rousseff (2011-2016).
"El golpe de Estado parlamentario contra Dilma Rousseff constituye una práctica sistemática de las corporaciones transnacionales para instaurar su modelo de dominación y recolonización", sostuvieron las organizaciones.
La Cumbre de los Pueblos también defendió a los "presos políticos de Curuguaty", en alusión a los 11 campesinos condenados en 2016 a penas de entre 4 y 30 años de prisión por la masacre en la que perdieron la vida 11 de sus compañeros y seis policías.
Aquellos hechos motivaron la destitución en 2012 del entonces presidente Fernando Lugo, un golpe de Estado parlamentario, a juicio de la Cumbre de los Pueblos, similar al que sufrió Rousseff.
La Cumbre de los Pueblos también manifestó su apoyo a una salida al mar para Bolivia, y secundó las pretensiones soberanas de Argentina sobre las australes islas Malvinas, ocupadas por el Reino Unido desde 1833.
Estaba previsto que el documento final de la Cumbre de los Pueblos fuera remitido, a través del presidente de Bolivia, Evo Morales, a los mandatarios de la cumbre oficial que concluye este 21 de julio.