Por su parte, el medio sirio publicó varios supuestos informes y fotos de una fábrica de armas ubicada en las afueras de la ciudad de Tartús, en la zona denominada el Valle del infierno. La instalación fue calificada por EEUU como una planta estatal siria clave para la fabricación de armas químicas. Según el periódico árabe, el propio presidente, Bashar Asad, autorizó la fabricación de avanzados misiles iraníes en Siria.
Según MEMRI, esta fábrica también tiene una planta en la provincia occidental de Hama, donde se encuentra una base militar rusa, en la que supuestamente prestaron servicio oficiales norcoreanos, lo que "demuestra" la supuesta colaboración entre Irán, Rusia y Corea del Norte en el Valle del infierno.
Por su parte, los expertos entrevistados por Sputnik declararon que esta información no se corresponde a la realidad y solo quiere "distanciar" a Siria, Irán y Rusia, así como inventar una buena excusa para permitir la invasión estadounidense del país árabe.
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Borís Dolgov, del Centro de Estudios Árabes e Islámicos del Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencias de Rusia, comentó a Sputnik que esto se debe a la "orientación general" de la propaganda de la oposición radical siria. El analista mencionó que, anteriormente, la oposición acusó a Damasco de usar armas químicas, "lo que de hecho fue una acusación absurda". Además, recordó los vídeos "graciosos" en los que los miembros de la organización Cascos Blancos —también conocida como Protección Civil Siria— aparecen evacuando a civiles heridos en un supuesto ataque químico sin usar máscaras de gas.
"Sin embargo, esto sirvió de pretexto para que EEUU atacara una base aérea siria", afirmó.
Asimismo, la oposición radical acusó a las autoridades sirias de construir una "cárcel secreta", donde son ejecutados cerca de cincuenta presos al día. No obstante, tampoco logró presentar pruebas concretas sobre la existencia del supuesto penal.
El académico agregó que la aparición de esta información en los medios estadounidenses solo puede servir de pretexto para un nuevo ataque militar de EEUU contra "la Siria de Bashar Asad". Además de esto, es un intento de vincular a Rusia, Irán, Siria y Corea del Norte y presentar la alianza como una "encarnación del diablo" que quiere atacar a EEUU o a sus aliados europeos con misiles y —por lo tanto— debe ser castigada y disuadida.
"No es más que un llamamiento para que EEUU mantenga la política antirrusa, antisiria y antiiraní", concluyó.
A su vez, el editor en jefe del periódico Iran Press, Emad Abshenad, afirmó en una entrevista con Sputnik que la supuesta actividad militar conjunta de Irán, Rusia y Corea del Norte en Siria es un "espejismo del valle de los sueños fabuloso" de EEUU e Israel. El analista indicó que Washington y Tel Aviv suelen recurrir a este truco para tener una excusa para interferir en los asuntos internos de Siria.
El experto afirmó que Israel y EEUU pretenden presentar a Rusia, Irán y Corea del Norte como un "frente del mal".
"No obstante, cualquiera persona razonable entiende que, por ejemplo, Corea del Norte podría utilizar estos misiles de largo alcance contra EEUU, e Irán, los usaría para disuadir a Israel", señaló Abshenad, refiriéndose al hecho de que llegados al caso de un enfrenamiento directo con Tel Aviv, Damasco solo necesitaría misiles de corto o medio alcance.
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El experto afirmó que Irán y Rusia son los aliados clave de Siria en su lucha antiterrorista y subrayó que Washington y Tel Aviv tratan de impedir —a través de la presión mediática y política— los avances militares del Ejército sirio y sus aliados en la región.