"Henry Ramos Allup y Julio Borges, ellos son los que han armado todo esto… lo armó Julio Borges y pagará ante la historia, ante la justicia, ante la constitución por los crímenes y la violencia que ha generado y por la que pueda generar", expresó Maduro.
El presidente hizo la denuncia durante un acto del programa social de alimentación transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión.
El jefe de Estado también responsabilizó a Borges y a la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de incendiar 4 millones de cajas con alimentos que serían distribuidos en el marco del programa social de alimentación.
"Es Julio Borges, es la MUD, son los partidos de la MUD los que en el mes de mayo y junio nos hicieron perder 4 millones de CLAP (cajas con alimentos); quemaron por lo menos 30 almacenes grandes de la Misión Alimentación y también incendiaron camiones para romper el proceso de distribución", destacó.
En este contexto, el jefe de Estado recordó que la medida que propuso para que el país vuelva a la paz es la Asamblea Nacional Constituyente, que se elegirá el 30 de julio.
"Vamos a tener en nuestras manos la solución a la violencia, la solución definitiva a la guerra económica porque la constituyente sí es la solución, es nuestra solución, la constituyente es el cambio que necesita Venezuela para derrotar a los violentos", recalcó.
Apoyo de Rusia
"El presidente Putin me ratificó todo el apoyo de la Federación Rusa al proceso democrático venezolano; me dijo unas palabras bien bonitas; el presidente Putin me dijo: 'admiro el coraje, la firmeza, y la valentía con la que has manejado esta situación, estoy seguro que el pueblo venezolano saldrá victorioso", relató.
A principios de abril la oposición venezolana salió a las calles para exigir la "restitución del orden democrático"; desde entonces se han registrado numerosos choques entre los manifestantes y los cuerpos de seguridad, así como saqueos a comercios, instituciones del Estado e intentos de asalto a batallones militares.
Estos hechos han dejado 95 muertos y más de 1.400 heridos entre los que se encuentran opositores, oficialistas, funcionarios de seguridad y transeúntes.