El medio ruso Popmech recopiló una lista de los diez insectos con 'superpoderes':
Las cucarachas, uno de los escarabajos que más aversión produce en el mundo, se cree que podrían sobrevivir fácilmente un cataclismo nuclear debido a su resistencia a la radiación. Y el cerebro de algunas especies contiene potentes antibióticos capaces de vencer a bacterias dañinas para los seres humanos.
A las abejas aparte de tener una memoria increíble, nadie las gana en lo que a comunicación y navegación se refiere y pueden encontrar su camino guiándose por la posición del sol, ni hablar de su 'talento' hacia la geometría, vista en las colmenas.

La langosta es especialista en largos vuelos. Aunque conocidas por su voracidad, consumen su energía con un impresionante ahorro: pueden volar hasta 80 km al día 'sin repostar', todo con controlar minuciosamente la dirección del vuelo.

Las luciérnagas no solo emiten luz, sino que también lo hacen de una manera muy económica. La utilizan como medio de comunicación, a través de la cual proporcionan varios tipos de señales.
Las pulgas son parásitos desagradables y francamente perjudiciales, pero con impresionantes habilidades. Son capaces de saltar hasta 150 veces su propio tamaño, lo que equivale a que los humanos pudiéramos volar a 200 metros de altura.
Los escarabajos peloteros son inofensivos y tienen la costumbre de hacer bolas de estiércol para construir los nidos y alimentar a las larvas. Lo peculiar es que ruedan sus bolas en una línea perfectamente plana incluso en completa oscuridad.
Las libélulas son los únicos insectos que poseen una concentración de la atención a nivel humano, pueden desconectarse de todas las 'interferencias' externas y centrarse en un único objetivo.
Las larvas de las avispas Glyptapanteles, tras salir de los 80 huevos inyectados en una oruga, son capaces de dominar el comportamiento de su víctima. Cuando la mayoría de las larvas 'salen' de la oruga para formar capullos, una o dos se quedan en su cuerpo, manipulándolo para que los proteja de los depredadores.
Los escarabajos bombarderos son maestros de autodefensa. Son capaces de atacar a su enemigo con un líquido hirviente —de hasta 100 grados centígrados- creado al mezclar dos compuestos químicos sofisticados en su vientre.