"(El destino del presidente sirio, Bashar) Asad no dividirá a Rusia y Catar, nuestro objetivo común para el futuro próximo es la desescalada", dijo en una entrevista con el periódico Vedomosti.
El ministro subrayó que es necesaria la cooperación de todas las partes para resolver la crisis siria.
Al mismo tiempo el diplomático admitió que Moscú y Doha discrepan en los métodos para lograr la estabilidad.
En particular, enfatizó, Doha no reconoce el derecho de Asad de participar en las elecciones y seguir en poder en caso de su victoria.
Lea también: Se acerca el 'último acto': ¿adónde será expulsado Daesh de Siria?
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas como Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, ambas prohibidas en Rusia y otros países.
Las hostilidades han causado, según estimaciones de la ONU, entre 300.000 y 400.000 muertos.