"No sería la primera vez que esta Corte lo decidiría", expresó el abogado de Temer Gustavo Guedes, que añadió que la Constitución prevé individualizar la condena.

Las defensas de ambos lo niegan y los abogados de Temer quieren además que el caso del actual presidente se juzgue por separado, para que el tribunal pueda condenar a Rousseff sin que afecte al mandato de Temer.
El otro abogado de Temer, Marcus Vinícius Furtado Coelho, pidió, por su parte, que el tribunal retire del proceso todas las pruebas entregadas por los ex ejecutivos de Odebrecht en los últimos meses.
En su opinión los hechos relatados por estos directivos no estaban previstos en la acción inicial del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que inició en diciembre de 2014 el proceso para derribar en la Justicia la candidatura que ganó las elecciones.
La defensa de Rousseff, que se expresó minutos antes que los abogados de Temer, también pidió que todo lo relativo a Odebrecht no forme parte del proceso judicial.
El TSE tiene hasta este jueves para emitir su veredicto, aunque es probable que la decisión se aplace, ya que cualquiera de los siete magistrados del caso puede pedir una prórroga para analizar el caso.
Si Temer y Rousseff son condenados la expresidenta perdería sus derechos políticos (no podría volver a presentarse para ocupar un cargo público en los próximos ocho años), mientras que Temer sería apartado de la presidencia y el Congreso Nacional elegiría a un sustituto.