Los socios europeos han recibido del mandatario una lección sobre cómo manejar el presupuesto militar. A pesar de todos los esfuerzos realizados por Europa para no enfadar a Trump, esta no ha logrado un acercamiento con Estados Unidos, destaca el periodista.
"Como un maestro en una escuela primaria, repitió sus anteriores afirmaciones de que Merkel y compañía le deben grandes sumas de dinero", señala Küstner.
Ahora, la Alianza está tratando de ganar la buena voluntad del empresario Trump con una transacción económica. "Nos estamos uniendo a la lucha contra el terrorismo y nos comprometemos a hacerlo todo para aumentar nuestros gastos en defensa; a cambio, tú no nos vas a llamar más obsoletos o perezosos", parecen decir los líderes de la organización, según Küstner.
No obstante, desde el principio estaba claro que negociar con Trump no sería fácil. El nuevo jefe de la Casa Blanca dio la bienvenida al Brexit y dejó en claro que el destino de la Unión Europea no solo le da igual, sino que la prefiere ver en partes separadas, recuerda el periodista alemán.
No queda claro si la próxima vez el presidente de Estados Unidos logre encontrar y usar las palabras correctas, nos las estropeara con alguna otra declaración o tuit "convirtiendo así el gran edificio de la organización transatlántica en un castillo de naipes", enfatiza Küstner.