"Considero inexcusable volverle a reiterar no solo la imposibilidad de tomar parte en aquello que propone, sino también la imposibilidad de que su Gobierno plantee tan grave amenaza a la convivencia y al orden constitucional", afirma Rajoy.
El texto remitido por el presidente catalán instaba a Rajoy a permitir que "los dos Gobiernos se puedan sentar en la mesa a dialogar" ya que, a su modo de ver, ya llegó el "momento imprescindible de la negociación".
En su respuesta, Rajoy dice estar dispuesto al diálogo y a la negociación con Cataluña, pero deja claro que "esta voluntad de entendimiento tiene como único límite el respeto a la soberanía nacional y al Estado de Derecho".
"Ni usted ni yo tenemos capacidad para negociar sobre aquello de lo que no disponemos", prosigue la carta.
La carta del presidente español recuerda a Puigdemont que en el ordenamiento jurídico constitucional se prevén mecanismos para "plantear toda clase de aspiraciones políticas siempre y cuando se proceda por los cauces democráticamente previstos y conciten el apoyo parlamentario necesario".
En ese sentido, Rajoy vuelve a instar a los dirigentes catalanes a llevar una propuesta de reforma de la Constitución a la Cortes Generales en lugar de plantear un referéndum pactado entre Gobierno central y autonómico.
"Mal se compadece el diálogo que dice ofrecer, con la amenaza de una declaración de independencia para el caso de no ser satisfechas sus pretensiones", dice la carta de Rajoy.
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Según explicó Puigdemont en una entrevista concedida a la televisión catalana 8tv en la noche del miércoles, la oferta de diálogo que contiene su carta a Rajoy es la "última" petición del Gobierno catalán al Ejecutivo central.