Ahora el nuevo fusil lleva una tapa de receptor fijada, la parte delantera y la manilla modernizadas, el compensador de retroceso con apagallamas y una culata ergonómica.
Actualmente, hay varios millones de fusiles tipo AK-74 en las unidades y los depósitos de las Fuerzas Armadas. Su modernización permite elevar la eficacia de armas pequeñas con gastos más moderados que si se compraran nuevos modelos. El nuevo pertrecho ya se suministra al Ministerio de Defensa.
Según el diario ruso Lenta.ru, la empresa ha confirmado que la versión civil del fusil modernizado aparecerá en venta en agosto de 2017.
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