"Ofrezco mis sinceras condolencias a la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, y al pueblo británico, hoy estamos de luto con ustedes, y mañana asestaremos juntos un golpe de respuesta a los que quieren destruir nuestro modo de vida", dijo Juncker en un comunicado.
"Estos ataques cobardes solo reforzarán nuestra disposición a cooperar para combatir a los ejecutores de estas acciones viles", subrayó Juncker.
La explosión en el estadio Manchester Arena tuvo lugar la noche del 22 de mayo poco después de que terminara un concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande.
Según la administración, se produjo fuera del recinto, cuando los espectadores estaban abandonando el espectáculo.
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El ataque dejó al menos 22 muertos y 59 heridos.