"Si tengo que declarar ley marcial, iré hasta el final", afirmó Duterte en una entrevista con medios rusos.
El mandatario filipino, que empieza este 22 de mayo una visita a Rusia, dijo que no va a parar "aunque esa guerra se prolongue por muchos años".
"No dejaré que mi país colapse, aunque tenga que decretar una ley marcial o matar. Lo haré", reafirmó.
EEUU y otras naciones de Occidente critican a Duterte por la brutal guerra contra el narcotráfico que comenzó tras tomar posesión del cargo a finales de junio de 2016.
La Policía Nacional de Filipinas documentó en el período del 1 de julio al 12 diciembre de 2016 más de 5.927 muertes relacionadas con la guerra contra las drogas, incluyendo 3.841 personas asesinadas extrajudicialmente y otras 2.086, en operaciones policiales.