El KJ-500 es capaz de monitorear el movimiento de más de 60 aviones en un radio de 470 kilómetros, según la corporación fabricante Shaanxi.
El radar puede ser utilizado para vigilancia, reconocimiento y recolección de datos en general. Esta capacidad puede ser útil en el mar del sur de China, donde muchas naciones reclaman derechos sobre diferentes islotes y arrecifes de coral.
Filipinas, Vietnam, Indonesia, Brunei y China mantienen reclamos territoriales sobre varias islas ubicadas dentro de la región, actualmente controlada por China desde la isla de Hainan.
El 8 de mayo, el comandante de la Flota del Pacífico de EEUU, Scott Swift, afirmó que Washington todavía mantiene la intención de desafiar a Pekín en el mar de China Meridional, a pesar de que el Pentágono ha negado numerosas solicitudes de la Marina de EEUU de llevar a cabo operaciones de libertad de navegación.