Aunque el Ejército israelí no confirmó, ni desmintió el ataque, el ministro de Inteligencia israelí, Yisrael Katz, dijo que el bombardeo está en consonancia con la política de Israel.
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El analista geopolítico Konstantín Sókolov explicó a Sputnik que este hecho puede analizarse en conjunto con el ataque ordenado por Donald Trump a una base aérea siria el pasado 7 de abril.
"Se producen acciones que buscan la internacionalización del conflicto en Siria. (…) Además, el objetivo acá, en mi opinión, no es cambiar radicalmente la situación", consideró el experto.
"Si se confirma [que el ataque fue hecho por Israel], esto significa que se trata de una provocación planeada, dado que el objetivo no fue algún lugar en el desierto", sostuvo el analista.
Sin embargo, concluyó, es poco probable que Damasco responda con el uso de la fuerza. Por el contrarió, intentará usar medidas diplomáticas como respuesta.