El punto clave del convenio ha sido la reestructuración de la deuda acumulada por la empresa Sea Launch—unos 330 millones de dólares—, comentó a Sputnik el director general de 'Energia', Vladímir Sólntsev.
A pesar de los obstáculos y adversidades, las partes dieron un paso esencial para proceder al diseño y realización de nuevos proyectos.
Proyectos con Boeing
"Los detalles del convenio están clasificados, pero lo importante ha sido retornar del callejón sin salida. Ahora pueden debatirse los proyectos conjuntos [con Boeing]: desde los vuelos a la Estación Espacial Internacional (EEI) hasta la exploración del espacio exterior", comentó Sólntsev.
Más aquí: Rusia firma un contrato con Boeing para llevar turistas al espacio
El gerente añadió que 'Energia' y Boeing lideran los programas espaciales tripulados en sus respectivos países y gestionan los módulos ruso y estadounidense de la EEI, de manera que ya mantienen contactos muy estrechos.
El futuro de Sea Launch
Dado el precario estado de la empresa ucraniana Yuzhmash, creadora del cohete Zenit, lanzado desde Sea Launch, el cosmódromo marítimo carece actualmente de su 'propio' cohete portador.
Yuzhmash admitió recientemente su incapacidad de reiniciar su producción por falta de recursos financieros.
Lea también: El vice primer ministro ruso llama a los ingenieros aeronáuticos de Ucrania a mudarse a Rusia
En este sentido, Sólntsev reiteró la disposición de 'Energia' de crear un nuevo cohete y ofreció los detalles de su visión.
"Proponemos crear un nuevo cohete portador de clase media, adaptado para el lanzamiento de todos los cosmódromos utilizados por Rusia: Baikonur, Vostochni y Sea Launch", precisó.
El objetivo principal del nuevo cohete será, claramente, sustituir el Zenit ucraniano, pero también crearle competencia al cohete de clase media Falcon 9 de la empresa estadounidense SpaceX, precisó Sólntsev.
Lea más: El creador de los motores RD-180 comenta las ambiciones de Elon Musk
S7 pactó con 'Energia' un acuerdo sobre el restablecimiento del estatus activo de Space Launch. La empresa espacial rusa se encargará de la ingeniería y organización técnica, mientras que la aerolínea asumirá el papel de operador de los lanzamientos.