"Vamos a tener un solo impuesto a las ganancias en el exterior, lo cual permitirá traer miles de millones de dólares que serán invertidos en EEUU para adquirir bienes de capital y crear empleos", señaló el funcionario en rueda de prensa.
Cuando Trump hizo esta propuesta en su campaña electoral de 2016, la agencia calificadora de riesgo Moody's advirtió que en el pasado medidas similares no reportaron un aumento de los ingresos de capital a EEUU.
Asimismo, Moody's señaló que la mayor parte de esas ganancias se emplearon para pagar deudas de bajo interés.
Un informe del Senado de EEUU realizado en 2011 sobre una desgravación impositiva aplicada en 2004 para repatriar ganancias, concluyó que apenas 843 de las 9.700 empresas con filiales en el exterior trajeron dinero al país, y esas empresas terminaron recortando 21.000 puestos de trabajo en lugar de emplear a más personal.