Los viejos creyentes, también conocidos como 'staroveri', en ruso, son los cristianos rusos partidarios de la vieja liturgia ortodoxa y de los viejos cánones. Por no aceptar la reforma religiosa de 1654, sufrieron duras persecuciones a lo largo de los siglos posteriores. Por esta razón, muchos de ellos abandonaron Rusia y algunos terminaron en América Latina.
Esto ha llevado al Gobierno a impulsar la creación de un programa estatal para ayudar al regreso voluntario a la Federación rusa de los viejos creyentes que se encuentran actualmente en el exterior y tomar las medidas necesarias para aumentar la efectividad del programa de entrega de tierras en el Lejano Oriente.
"Traduzcamos las discusiones de hoy al idioma de la toma de decisiones gubernamentales con la creación de un documento correspondiente, un plan de trabajo para el auxilio a los viejos creyentes en su vida en el Lejano Oriente. No solo a aquellos que se encuentran en el exterior, sino también a los que dentro de Rusia quieren mudarse al Lejano Oriente. Así se llamara, Plan de Trabajo para el planeamiento de la ayuda en el reasentamiento y la vida de los viejos creyentes en el Lejano Oriente", señaló Alexandr Galushka, ministro para el Desarrollo del Lejano Oriente de Rusia.
El programa incluirá tres lineamientos:
- Tierras para la vida y la gestión agrícola
- La adaptación de las personas
- El apoyo gubernamental a los viejos creyentes
Igualmente y de acuerdo con la información suministrada por el Ministerio, es necesario que los viejos creyentes que ya han regresado reciban toda la ayuda posible para que se conviertan en un ejemplo y una historia del éxito del regreso de los 'staroveri' a Rusia.