En marzo, casi 60% de la población de 15 años y más se ubicó como población económicamente activa (PEA, 59,8%) y de ese total, "en su comparación anual, la tasa de desocupación disminuyó en marzo a 3,5% comparado con el 4,1% del año pasado", dijo el INEGI.
La informalidad en México sigue siendo un fenómeno criticado por le expertos y sindicatos, debido a que más de la mitad de los trabajadores económicamente activos en empresas formales padecen condiciones laborales que los hacen vulnerables, porque no cuentan con seguridad social, jubilación, vacaciones y otras prestaciones sociales legítimas.
El trabajo informal también se refiere a personas que laboran en "micronegocios no registrados".
Asimismo, existe una importante tasa de subocupación, que siguió disminuyendo en marzo de este año al colocarse en 7,2%, frente a 7,9 del mismo mes de 2016.
Subocupación e informalidad
En marzo los trabajadores subocupados, con un empleo y con necesidad y tiempo para trabajar más horas, se mantuvieron en rangos similares al mes pasado, en 7,2%, mientras en febrero fueron 7,3% y en marzo del año pasado, 7,9%.
El porcentaje de los ocupados que encontraron trabajo en el sector informal se redujo de forma marginal en comparación con febrero (cuando fue 26,8%), pero subió 0,4% hasta abarcar 27,2% de toda la población ocupada.
El sector informal se refiere a "la proporción de la población ocupada en unidades económicas no agropecuarias operadas sin registros contables y que funcionan a partir de los recursos del hogar o de la persona que encabeza la actividad sin que se constituya como empresa", dijo el INEGI.
Mientras tanto la población económicamente activa siguió aumentando al ritmo de la población.
Al final de este año el desempleo podría incrementarse, porque el Gobierno bajó la expectativa de crecimiento económico nacional en 2017 a un rango de 1,5 a 1,7%, desde un 2,5 previsto en el presupuesto anual, debido a las nuevas políticas comerciales de EEUU.
Pero el Banco Mundial pronosticó esta semana un avance económico aún menor a su estimación de enero.
El país latinoamericano crecerá un magro 1,4% en 2017, y dos por ciento en 2018, entre otras causas por la amenaza de políticas proteccionistas que pretende EEUU, principal socio del país latinoamericano.