Anteriormente la agencia Reuters afirmó citando a siete fuentes anónimas que el Instituto Ruso de Estudios Estratégicos (RISS, por sus siglas en inglés) elaboró un plan para interferir en los comicios presidenciales de Estados Unidos.
"No estoy al tanto de eso, solo puedo decir que siete fuentes anónimas no valen tanto como una real", dijo Peskov.
El RISS es un 'think tank' que se dedica al estudio de la seguridad nacional y las relaciones de Rusia con otros países.
Además pronostica y analiza las tendencias de los procesos políticos y socioeconómicos a nivel regional y global.
En octubre de 2016, a un mes de las elecciones en EEUU, las agencias de inteligencia norteamericanas acusaron a Rusia de haber interferido en el proceso electoral al supuestamente hackear los servidores del Partido Demócrata.
Moscú negó en reiteradas ocasiones su implicación en las filtraciones y calificó de absurdas las acusaciones al respecto.
El propio Donald Trump, en una entrevista a la cadena local Fox New realizada en diciembre, catalogó de ridículas las afirmaciones de la CIA de que Rusia le ayudó a ganar los comicios.