El enfrentamiento tuvo lugar en la aldea de Yabanardi, en la provincia de Diyarbakir, cerca de una escuela en la que se encuentra un centro de votación.
Más de 55 millones de turcos están llamados a las urnas este 16 de abril para decir "sí" o "no" a un paquete de enmiendas constitucionales ya aprobadas por el Parlamento.
Los cambios otorgan amplios poderes ejecutivos al presidente de la nación que podrá en particular promulgar decretos con fuerza de ley, declarar estado de excepción, designar vicepresidentes, ministros y otros altos cargos, y no estará obligado a suspender la filiación política como ahora.
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También se prevé suprimir el puesto de primer ministro, reducir de 25 a 18 años la edad mínima para postularse a la asamblea legislativa y aumentar de 550 a 600 el número de los escaños parlamentarios.
A los cambios constitucionales se oponen dos partidos de la oposición, el Partido Republicano del Pueblo (CHP, centroizquierda) y el Partido Democrático de los Pueblos (HDP, prokurdo), que acusan de Erdogan de aspiraciones autoritarias.
De ser aprobadas las enmiendas, Turquía celebraría elecciones legislativas y presidenciales el 3 de noviembre de 2019, fecha que marcaría su paso al modelo de república presidencialista.