Se trata de Atabek Rustámov, arrestado por dos meses hasta el 4 de junio.
"El tribunal considera que un castigo más suave permitiría al enjuiciado cometer nuevos delitos", declaró el juez.
Después del atentado en el metro de San Petersburgo, fueron detenidos ocho nativos de Asia Central, sospechosos de reclutar para Daesh y el Frente al Nusra.
Por ahora se desconoce si están implicados en el atentado.
Rustámov, ciudadano de Kirguistán, está casado, tiene cuatro hijos y, según afirmó, trabajaba de albañil en San Petersburgo.
El lunes 3 de marzo el metro de San Petersburgo fue blanco de un ataque suicida con bomba que dejó 14 muertos y más de medio centenar de heridos.
Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra son grupos terroristas proscritos en Rusia y otros países.