"Bonadío procesó a la familia Kirchner", comentaron las fuentes.
El caso, que comenzó en abril de 2015, investiga el pago de alquileres de los hoteles que pertenecen a la sociedad inmobiliaria familiar Los Sauces a cambio de que supuestamente empresarios afines fueran favorecidos con contratos de obra pública.
Fernández de Kirchner fue acusada, en concreto, de liderar una asociación ilícita, de incurrir en el lavado de activos y de negocios incompatibles, por lo que el juez prohibió su salida del país, así como la del resto de los procesados.
La expresidenta es considerada "autora penalmente responsable de los delitos de tomar parte en una asociación ilícita en calidad de Jefe, el cual concurre en forma real con el delito de lavado de activos de origen ilícito agravado por su habitualidad, por formar parte de una asociación y por ser funcionario público y negociaciones incompatibles", según la resolución del magistrado.
Ese magistrado instruye además la sociedad hotelera Hotesur, también propiedad de la familia Kirchner, investigada por presuntas irregularidades en el alquiler de hoteles al empresario detenido Lázaro Báez.
Según Bonadío, todas esas causas están conectadas.
Por eso el magistrado propuso que se realice un juicio oral y público único donde se unifiquen estas tres causas, ya que los acusados son las mismas personas.
Esta decisión corresponde a la Cámara Nacional en lo Criminal y Correccional Federal de Argentina en el caso de que confirme los procesamientos, pues se da por descontado que los acusados apelarán su procesamiento.
Lea más: Repercusiones sobre el procesamiento de Cristina Kirchner
Es la primera vez que la justicia procesa a los hijos de la exmandataria, mientras que la exjefa de Estado acumula ya tres procesamientos: la de Los Sauces, la que indaga sobre la obra pública realizada durante su gestión y la de otro caso que investiga la venta de dólar a futuro durante su Gobierno.