"Tenemos que presionar a Rusia e Irán. Queremos que Rusia sepa lo cuán peligroso es (el presidente sirio Bashar) Asad en el poder, queremos que Irán influya en la situación en Siria y queremos llevar a Asad ante la justicia por los crímenes que cometió", dijo en una entrevista a la cadena ABC.
Asimismo, reiteró la posición de Washington que aboga por la dimisión de Asad.
Rusia ha declarado en repetidas ocasiones que el destino del presidente sirio lo debe ser decidir exclusivamente el pueblo de Siria.