"Las obras de ampliación y modernización empiezan esta primavera (boreal) y se prolongarán por cinco años (…) Por el momento, no se trata de crear una base cabal, sería muy costoso", apuntó la fuente.
Paralelamente será necesario desarrollar las infraestructuras, en particular, para el suministro de energía eléctrica, agua y combustible.
"Hay que hacer toda la logística, incluyendo los nuevos cuarteles, pues la plantilla va a aumentar", dijo el representante de Defensa.
Las hostilidades en Siria, agregó, continúan así que también se prestará mucha atención a la defensa de Tartus, ante todo, con sistemas antiaéreos.
En enero de 2017, Rusia y Siria firmaron un acuerdo que prevé la ampliación del área de mantenimiento de buques de la Armada rusa en el puerto de Tartus y las entradas de navíos militares rusos en el mar territorial, aguas interiores y los puertos de Siria.
El acuerdo, que regirá durante 49 años y podrá prolongarse por otros 25, estipula que el puerto de Tartus acogerá un máximo de 11 buques rusos a la vez, incluyendo los de propulsión nuclear.