El nombre del comando refiere al general uruguayo Pedro Barneix, un represor de la dictadura que se quitó la vida en 2015, tras saber que había sido procesado por la Justicia debido a su vinculación con el asesinato en 1974 del comerciante Aldo Perrini, por una presunta vinculación a grupos políticos de izquierda.
Otros activistas que impulsan causas por los crímenes de lesa humanidad también fueron objeto de la amedrentación del Comando Barneix, entre ellos la investigadora de la Universidad de Oxford, Francesca Lessa, y la ex vicecanciller de Uruguay, Belela Herrera.
Álvarez Petraglia, exjuez y abogado patrocinante de una denuncia de abuso sexual sufrido por 28 presas políticas durante la dictadura, comentó a Sputnik que fue contactado por la Policía por vía telefónica, pero que no fue citado a la Justicia, a diferencia de otros destinatarios de la amenaza.
"En este momento la causa está en [el Juzgado] Penal [de] 16 [turno de Montevideo]. Supongo que se estará investigando el servidor del cual salió ese correo. Hasta el momento no hemos tenido ninguna novedad sobre este punto", comentó el jurista.
Álvarez Petraglia aseguró que es la primera vez que intentan amedrentarlo en toda su carrera, estrechamente vinculadas a la búsqueda de Justicia por las violaciones a los derechos humanos ocurridas en dictadura, tanto en la judicatura como en la actividad profesional libre.
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"Recibí la amenaza con un poco de incredulidad, porque honestamente me da la impresión de que debe ser producto de algún movimiento interno para generar un poco de zozobra, pero por lo menos en mí no lo lograron hacer, no sé en los demás compañeros. A mí, con total honestidad, me fue casi indiferente la amenaza en cuestión", aseveró.
Álvarez Petraglia se mostró crítico respecto al transcurso en juzgados uruguayos de las distintas causas vinculadas a crímenes de lesa humanidad en dictadura. Según el letrado, "en Uruguay se llegó a juzgar prácticamente solo a las cabezas visibles de la represión total" de la época, pero "por debajo hay denuncias que involucran a cientos de civiles y militares" que morirán "libres, sin siquiera haber sido citados por la Justicia".
"Hay más de cien causas pero con resultados de procesamientos o de condena son muy pocas, máxime si nos comparamos con otras realidades, como por ejemplo Argentina, de las que estamos a años luz", concluyó.
