Acorde a este papel, "Siria será un Estado democrático y laico basado en pluralismo político, supremacía de la ley, división de poderes, independencia de jueces, protección de unidad nacional, reconocimiento de la diversidad cultural de la sociedad siria, protección de libertades públicas, un gobierno transparente, inclusivo y responsable".
Además, el plan no oficial para Siria del enviado especial de la ONU para el país árabe, Staffan de Mistura, rechaza cualquier forma de terrorismo.
"Se refuta totalmente el terrorismo, fanatismo, extremismo y sectarismo en todas sus formas", reza uno de los artículos de documento que contiene 12 propuestas que De Mistura entregó a las delegaciones.
Asimismo, el documento estipula "apoyo a los vulnerables, los débiles y enfermos, a los pobres, así como seguridad y refugio para los desplazados y refugiados, incluido su derecho de regresar a sus casas si lo quieren".
De acuerdo con el séptimo punto del plan, en disposición de Sputnik, se prevé crear en Siria "unas fuertes Fuerzas Armadas conjuntas que protegen exclusivamente las fronteras nacionales y al pueblo sirio de las amenazas externas conforme con la Constitución y los servicios de inteligencia y seguridad".
Las Fuerzas Armadas se centrarán en "velar la seguridad nacional y actuarán de conformidad con la ley", añade.
El representante de la ONU menciona también el respeto a los derechos humanos y las libertades, la no discriminación e iguales derechos y oportunidades para todos independientemente del género, el origen racial y étnico, la identidad religiosa, cultural y lingüística, y prevé un nivel de participación de al menos del 30% para las mujeres.
La ronda anterior tuvo lugar del 13 al 27 de abril de 2016.
La resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU, aprobada unánimemente en diciembre de 2015, marca el objetivo de establecer una gobernanza creíble, incluyente y no sectaria en el país árabe, así como un calendario y un proceso para la redacción de una nueva Constitución, para después celebrar elecciones libres y justas bajo la supervisión de las Naciones Unidas.