"Tardaremos hasta tres años en su desarrollo y, si todo va bien, el vuelo inaugural tendrá lugar a finales de 2018", dijo el ejecutivo de la empresa.
El nuevo cohete tendrá un diseño modular y estará equipado con motores que fueron utilizados en los modelos Larga Marcha 5 y 7.
Será capaz de enviar una carga útil del orden de 4,5 toneladas a una órbita sincrónicca al sol o 2,5 toneladas a una órbita geosíncrona, según Li.
Gracias al nuevo cohete será posible reducir en grado considerable los costos de lanzamiento de satélites a las órbita bajas y medias.