"Es difícil imaginar que un canciller alemán haya enviado tanques a la frontera rusa. ¡Detengan a estos locos!", escribió una lectora en respuesta a un artículo acerca del equipo militar alemán enviado a Lituania.
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"¿Qué queremos en la frontera rusa?", cuestionó otro lector. "Debido a nuestra historia, ya tenemos una deuda eterna con todo el mundo, pero ¿ahora estamos acercándonos a la frontera con Rusia?", concluyó.
"Por un lado, la Alianza ha dicho que es necesario un diálogo con Moscú, mencionando amenazas comunes que podrían ser tratadas conjuntamente. Por otro lado, la organización ha difundido incansablemente especulaciones sobre los supuestos planes sanguinarios de Moscú, los cuales tienen que ser detenidos. No se trata siquiera de posiciones contradictorias, sino de una disonancia cognitiva crónica", subrayó Jarlámov.