Así opina el experto Lee Suhyeong y señala que Pyongyang quizá tenga que aplicar la experiencia de la URSS en este aspecto.
En la actualidad el programa de misiles se basa en la oposición a las alianzas de Estados Unidos con los países de la región como Japón, Corea del Sur y otros, mientras el territorio norteamericano está fuera del alcance de los misiles norcoreanos.
En una entrevista a Sputnik, Lee explicó que en este caso Corea del Norte podría adoptar la experiencia de la Unión Soviética. Recordó que cuando Washington ya disponía de armas nucleares capaces de alcanzar el territorio soviético, Moscú no tenía la posibilidad de realizar un ataque en respuesta, que fuera tan fuerte como el de EEUU.
Entonces comenzó a desarrollar los misiles de corto y medio alcance para amenazar a los aliados de Estados Unidos que estaban situados más cerca de la URSS. Esto previno un ataque contra la Unión Soviética y entretanto permitió que Moscú desarrollara sus armas nucleares estratégicas.
El especialista señala que a día de hoy Estados Unidos necesita garantizar la seguridad de sus aliados antes de llevar a cabo un ataque preventivo contra Pyongyang. A no ser que los norteamericanos lo consigan, este ataque seguirá siendo imposible.
Es decir, prosiguió, antes de que Corea del Norte concluya la creación de los misiles balísticos intercontinentales, el país debe emplazar sus misiles de corto y medio alcance capaces de atacar los territorios de los aliados.
"[A Pyongyang] le bastaría armar con ojivas nucleares a sus misiles Rodong y Musudan para que amenacen a los aliados de EEUU —Japón, Corea del Sur y otros— impidiendo efectivamente la posibilidad de un ataque preventivo por parte de EEUU contra [Corea del Norte]", dijo.
Añadió que solo entonces Pyongyang tendrá suficiente tiempo para finalizar el desarrollo de sus misiles intercontinentales. En el futuro la RPDC podría desarrollar tecnologías de misiles balísticos al utilizar este 'dilema de la alianza', concluyó.