"Una ruptura de las relaciones México-EEUU podría poner en riesgo tratados existentes, elevar la presión sobre los recursos hídricos y en definitiva disparar condiciones de escasez que tendrían un efecto devastador en los empleos y la economía del oeste del país", dijo el analista en políticas de tierras públicas del CAP, Ryan Richards, en un comunicado que acompaña el estudio.
Richards, autor del informe, observó que las reservas de agua en la cuenca del río Colorado se encuentran ahora a su nivel más bajo de los últimos 100 años debido a condiciones persistentes de sequía.
"Más de 35 millones de estadounidenses dependen del agua potable del río Colorado, pero esas reservas podrían peligrar si la administración de Trump no asume con seriedad estos desafíos", observó Richards.
Los derechos al agua del río Colorado que tienen los dos países están determinados por un tratado de 1944 que requerirá una nueva ronda de negociaciones este año, añade el informe.