"Nuestro Gobierno está empeñado en trabajar con Israel y nuestros aliados comunes en la región hacia una mayor seguridad y estabilidad; esto incluye contribuir a un acuerdo de paz entre Israel y los palestinos", dijo el mandatario estadounidense.
Como sucede en toda negociación para que resulte exitosa, "ambas partes deben ceder", sostuvo.
El presidente estadounidense sugirió que los israelíes deben demostrar flexibilidad y hacer visible su voluntad de llegar a un acuerdo.
Los palestinos, a su vez, deben deshacerse de "algo del odio que les han inculcado desde muy pequeños" y reconocer a Israel, dijo Trump.
"Creo que la gran oportunidad para la paz procede de un abordaje regional, de involucrar a nuestros nuevos aliados en la búsqueda de una paz más amplia y de una paz con los palestinos", dijo el primer ministro.
Por otra parte, Trump se mostró abierto a cualquier solución del conflicto, sea esta la constitución de un solo Estado o el establecimiento de dos Estados, uno para los israelíes y otro para los palestinos, que ha sido desde hace décadas el arreglo bajo el cual han discurrido todos los esfuerzos internacionales de mediación.
"Puedo vivir con cualquiera de las dos soluciones (…) prefiero la que prefieran ambas partes", dijo el mandatario.
Los palestinos reclaman que se reconozcan como un solo Estado independiente sus territorios de Cisjordania, incluyendo Jerusalén Oriental, ocupados por Israel, y la Franja de Gaza.
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La mudanza de la embajada de EEUU
El Gobierno de EEUU está intentando mudar su embajada en Israel de Tel Aviv a Jerusalén, dijo Donald Trump.
"Respecto a la mudanza de la embajada a Jerusalén, me encantaría; lo estamos intentando con gran firmeza; lo estamos intentando con gran cuidado, créanme, y veremos cómo resulta", señaló Trump.
Para la comunidad internacional, la porción oriental de la ciudad es un territorio palestino ocupado, y por tal razón las sedes diplomáticas extranjeras se han asentado históricamente en Tel Aviv.
El Congreso de EEUU aprobó en 1995 una ley estableciendo que la embajada de ese país debía mudarse de Tel Aviv a Jerusalén, pero la mudanza nunca se llevó a cabo.
Durante su campaña electoral, Trump prometió que ordenaría la mudanza, despertando críticas del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, quien advirtió que tal medida no contribuiría a la paz en Medio Oriente.