"En el proyecto ruso de Constitución siria hay puntos positivos, en particular, la eliminación de la palabra 'árabe' del nombre del país, así como la reducción del poder presidencial", dijo Muslim.
El político señala que el documento contiene también puntos que deberían ser modificados, pues, a la vez que reconoce las minorías étnicas, propone a los kurdos una "autonomía cultural" muy alejada de los derechos políticos que persiguen sus activistas.
"Insistimos en nuestros derechos políticos y en fijar con exactitud las fronteras geográficas de nuestra región", precisó, agregando que los kurdos aspiran a una formulación más precisa de los derechos de las minorías étnicas, así como a un cumplimiento estricto de los mismos.
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Para Muslim, la aparición del proyecto ruso representa en general "un paso positivo".