"Tenemos que alcanzar una paz completa, no solo para Colombia sino para América Latina", dijo el consejero mayor de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), Luis Fernando Arias, en una rueda de prensa previa al inicio de las negociaciones en la capital ecuatoriana.
Debido a que las negociaciones con el ELN tendrán el acompañamiento de varios países garantes, Arias considera que ese será un eslabón "muy importante para apuntar a todas esas transformaciones".
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Por su parte la activista campesina Marylén Serna, vocera del Congreso de los Pueblos de Colombia, destacó la amplia participación ciudadana en el proceso de paz, aunque señaló que su interés es que "no se trate solo de recoger las propuestas, sino de generar espacios amplios, participativos y democráticos donde la gente sienta que aporta".
"La propuesta de participación no es solo ir donde está la mesa de negociación, sino también que se abra ese espacio para que se pueda escuchar de manera directa a las comunidades en los territorios", apuntó la activista.
"No es suficiente que los colombianos y colombianas nos estemos pensando este proceso" pues "es una gran necesidad y una oportunidad política para que los países latinoamericanos nos juntemos alrededor de cuál es la agenda para la paz que nos articula como pueblo latinoamericano y cuáles son esos espacios de participación que vamos a solicitar", argumentó.
El encuentro de grupos sociales y organizaciones no gubernamentales se llevó a cabo este martes en la Casa de la Cultura Ecuatoriana.
El Gobierno de Colombia y el ELN inauguran este martes la primera mesa pública de diálogos, postergada desde el 27 de octubre.
El ELN es la segunda mayor guerrilla colombiana luego de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que firmó la paz con el Gobierno en noviembre y se encuentra actualmente en proceso de desmovilizarse y dejar las armas.