Desde que empezó el paro de policías la capital del estado de Espírito Santo, en el sureste del país, murieron de forma violenta 68 personas, según el sindicato de policías civiles.
Las escuelas públicas permanecen cerradas, mientras que el servicio de autobuses, que estaba interrumpido a primera hora de la mañana se está restableciendo a lo largo del día, según el gobierno del estado.
El gobierno, a través de la secretaría de Seguridad Pública, también informó de que los policías militares empezarían a patrullar las calles a pie, sin los coches, pero según la prensa local apenas se ha visto ningún policía.
Ante la ola de violencia gobierno del Espírito Santo solicitó ayuda de urgencia al gobierno federal, que autorizó el envío de más de 1.000 militares del Ejército, 250 de los cuales llegaron este martes.
Reivindican mejoras salariales y de las condiciones de trabajo, ya que según la Asociación de Cabos y Soldados de la Policía Militar y Bomberos Militares de Espírito Santo hace siete años que no tienen un aumento de sueldo y tres años que no se compensa la subida de la inflación.
Este martes se filtró un video en Facebook en el que el secretario de Seguridad calificó el movimiento de "payasada" y acusó a los policías militares de apoyar a las familias, realizando una "huelga blanca".
El ministro de Defensa, Raul Jungmann, aseguró que las Fuerzas Armadas estarán en Espírito Santo "el tiempo que sea necesario" hasta que se restablezca el orden en las calles.