Los investigadores estadounidenses llegaron a esta conclusión tras haber realizado una serie de experimentos sobre dos grupos de ratones.
Mientras que los ratones del primer grupo fueron privados del sueño con ayuda de las medicinas, a los roedores del segundo se les permitió mantener su ciclo normal de sueño.
Los resultados del experimento revelaron que el grupo que durmió bien tenía una disminución de un 20% en los procesos sinápticos del hipocampo y la corteza cerebral, los cuales son responsables del aprendizaje y de la memoria. Esto les permitió procesar y organizar mejor los nuevos recuerdos en la memoria que el grupo que estuvo todo el tiempo en la cima de su actividad cognitiva de manera forzada, explica ScienceDaily.
Los investigadores apuntan a que este proceso se realiza gracias al funcionamiento de la proteína Homer1a, responsable de 'tranquilizar' a las neuronas y regular el sueño. La cantidad de esta proteína aumentó en el organismo de los roedores que habían dormido bien.
Los especialistas consideran que el sueño podría desempeñar la misma función en el organismo de los humanos.
"El sueño no es un período de calma para el cerebro. Es un proceso necesario para un importante trabajo, y los que lo pasan por alto se perjudican a sí mismos", señala Graham Diering, uno de los líderes de la investigación.
Pues, el consejo de dormir para solucionar un problema podría cobrar un nuevo significado.