Este jueves se produjo la muerte cerebral de la ex primera dama, pero siguiendo el protocolo oficial para constatar el óbito, había que realizar dos exámenes médicos este viernes: uno al mediodía y el otro a las 18 horas.
Un boletín médico del hospital informó el jueves por la mañana de la ausencia del flujo cerebral y poco después el propio Lula explicó en su perfil oficial de Facebook que la familia ya había dado permiso para que se iniciaran los procedimientos para la donación de órganos.
Marisa Letícia fue ingresada en este hospital el pasado 24 de enero al sufrir un accidente cerebral vascular hemorrágico, y aunque fue sometida a una operación quirúrgica de dos horas su estado no mejoró.
El jueves, poco después de conocerse su muerte cerebral, Lula recibió la visita en el hospital del expresidente Fernando Henrique Cardoso (Partido de la Social Democracia Brasileña).
Por la noche se acercó a prestar sus condolencias el actual presidente, Michel Temer (Partido del Movimiento Democrático de Brasil) y este viernes lo hizo la expresidenta Dilma Rousseff.
El velatorio de la ex primera dama se celebrará en el Sindicato de los Metalúrgicos del ABC, en São Bernardo do Campo (São Paulo), en un horario aún por definir.